Movilidad in itinere
Todavía son muy pocas las empresas que disponen de planes de traslado, porque hasta antes de la pandemia, la movilidad in itinere no había sido una prioridad para la mayoría de las compañías. Sin embargo, la crisis del Coronavirus ha demostrado la importancia de este tipo de movilidad, sino ¿cómo llegarán los empleados de forma segura y sin infectarse a su espacio de trabajo?
El primer punto de impacto del COVID-19 sobre la movilidad in itinere fue la reducción y hasta casi nulidad del uso del transporte público (para evitar y por miedo al contagio). Las empresas que aún no proporcionaban servicio de traslado, se encontraron con un punto crucial a resolver.
Confiabilidad
En cuanto al servicio en sí, la nueva normalidad trajo aparejada una serie de incorporaciones a cada vehículo y por cada viaje. Se desarrollaron protocolos para el cuidado de pasajeros y conductores, incluyendo “kits de seguridad y prevención” (mascarillas, guantes y sanitizante) para los transportistas, la colocación de mamparas en el interior de las unidades para asegurar la separación de los espacios del conductor y los viajeros, y el uso de barbijos por parte de los pasajeros.
Movilidad empresarial
Lentamente y con todas las medidas de prevención y cuidados especiales, las empresas vuelven a activar sus viajes. La confianza, la responsabilidad y los costos serán los determinantes en la selección del servicio.